El alma que ha visto, lo mejor posible, las esencias y la verdad, deberá constituir un hombre, que se consagrará a la sabiduría, a la belleza, a las musas y al amor. Platón, Fedro o de la belleza.
Perhaps he knew, as I did not, that the Earth was made round so that we would not see too far down the road. Isak Dinesen
Sólo vemos lo que miramos. Mirar es elegir. John Berger
Y cogeré hasta el final de los tiempos, las plateadas manzanas de la Luna, las doradas manzanas del Sol. William Butler Yeats

martes, 17 de marzo de 2015

Doctor Thackery and Mr. Halsted (The Knick)




¡Brillante!, eso me ha parecido la primera temporada de la serie estadounidense "The Knick" dirigida por Steven Soderbergh. A los que estáis enganchados a series esta puede ser una más de las muchas que andan circulando por nuestros monitores pero a mi que me cuesta seguir las últimas tendencias desde luego que The Knick me ha sorprendido, y ¡mucho!. 
No voy a destriparla, tampoco a contaros el final, lo que si que voy a hacer es dar algún que otro dato que hará aún más apetecible el verla.
En la serie se entremezcla la sordidez del ambiente y una estética exquisita, todo ello bajo la batuta de su personaje principal, el Doctor John William Thackery, un prominente cirujano en el New York de principios del siglo XX. 


La serie se inspira en la historia real del Knickerbocker, un hospital de la zona norte de Manhattan fundado en 1862 y que cerró sus puertas en 1979. La serie no es solo un reflejo de los múltiples experimentos científicos y quirúrgicos de principios de siglo a los que son sometidos los pacientes de Thackery, es alucinante el efecto que produce en una sociedad el descubrir la electricidad, los rayos X, por no hablar del suministro de opiáceos y cocaína. Curiosamente en el año 1900 la cocaína se suministraba de manera legal en farmacias sin necesidad de receta ni prescripción médica. 
La serie también es un reflejo de la sociedad neoyorquina, profundamente racista e intolerante, apegada al conservadurismo de las clases altas y con unos elevados índices de corrupción entre sus habitantes. Mafia, trapicheos, abortos ilegales, fumaderos de opio, todo un cóctel riquísimo en desdichas pero que hacen del espectador un consumidor nato.



El Doctor Thackery (interpretado por Clive Owen), está inspirado en la figura de William Halsted (1852-1922), un innovador médico considerado uno de los pioneros de la cirugía moderna. Cursó sus estudios en la Universidad de Columbia viajando a Europa en donde realizaría estudios prácticos en el campo de la anatomía. Su vuelta a los EE.UU le llevaron a un peregrinar por diferentes hospitales de New York, cultivando ya su fama como cirujano. En el campo de la investigación describe la anestesia y el uso de la cocaína y la morfina. Dejando a un lado los eufemismos, Halsted consumía cocaína de manera habitual lo que le llevó a una cura de desintoxicación en el Centro Providence en 1886. No debería hablar de ello, ya que desvelo una parte del tratamiento, pero de ser verdad, dato que aún no he verificado, la Casa Bayer, sí la de las aspirinas, trataba el síndrome de abstinencia de los cocainómanos con la administración de heroína...



John Singer Sargent (1856-1925) pintor impresionista norteamericano, retrata en "The Four Doctors" al grupo de médicos más reconocidos de la época. El cuadro fue pintado en 1905 y de izquierda a derecha vemos a: Welch, Halsted, Osller y Kelly. Aunque en el cuadro abundan los negros y las sombras, se comentaba que debida a la difícil personalidad de Halsted, el tiempo acabaría consumiendo los colores de la pintura...



La serie no sólo trata de vísceras y sangre, lo cierto es que adquiere tal pulso e intensidad que necesitas otra dosis de capítulos conforme vas consumiéndola. Uno de los momentos más singulares y bellos lo protagonizan el Doctor Thackery y la enferma Elkins. Ella, joven y bella tiene una bicicleta azul, la cual utiliza diariamente para acudir a su trabajo en el hospital. Lo curioso es que el Doctor Thackery, experto cirujano, no sabe montar en bicicleta, ese medio de transporte (algo) revolucionario para la época, pero visto por algunos como una diversión. Elkins le mira y le enseña cómo montar en bicicleta; creo que Thackery en ese mismo instante es libre, libre de la cocaína, libre de sus múltiples obsesiones y experimentos quirúrgicos, ¡libre por cinco minutos!



En el año 1890 William Halsted es nombrado jefe de servicio de cirugía del recién inagurado hospital de la Universidad John Hopkins, convirtiéndose en el primer profesor de cirugía de la escuela de medicina. Otra de las anécdotas que se cuentan y basadas en hechos reales es la que aconteció a su ayudante en el quirófano, Caroline Hampton, con la que se casaría después. Pues bien, ella padecía una dermatitis causada por la utilización de antisépticos. Halsted, encargó a la empresa Goodyear (fabricante de neumáticos y artículos de caucho) que fabricara unos guantes de goma para la protección la piel de su ayudante. Tendría que ser una goma muy fina que les permitiese la fácil manipulación del material quirúrgico. ¡Qué curioso! este fue el origen de la utilización actual de los guantes de goma en los quirófanos, lo cual me lleva a otra historia del blog que protagonizó el misterioso Doctor Semmelweis, aquel húngaro que en el siglo XVIII detectó la importancia de lavarse las manos antes de intervenir a un paciente, a partir de entonces se salvaron muchas mujeres de las terribles fiebres puerperales.
Las aportaciones del Doctor William Halsted han sido determinantes para el desarrollo de la cirugía moderna con la sistematización de procedimientos para cirugía del sistema vascular, tiroides, hernia, cáncer de mama y la introducción de importantes aportaciones técnicas en el campo de los materiales de sutura y la asepsia.
Un último dato y acabo. No dejen escapar los temas correspondientes a la banda sonora de la serie escrita por Cliff Martínez, anacrónica e intemporal pero también, ¡brillante!


domingo, 1 de marzo de 2015

Luz, cámara y acción.

Animal locomotion. 1887

Hago un recuento al azar de las películas que puedo haber visto hasta ahora, y la verdad...ni idea. Podría hacer una media: a dos películas por semana, multiplicado por aproximadamente veinticinco años...dos mil cuatrocientas, si a eso le añadimos el metraje en extensión de cada rollo, pues me salen una barabaridad de metros, suficientes para envolver la circunferencia de la tierra. Pero, ¿por qué tantos cálculos?
En el año 1888 se produjo algo innovador: un hombre llamado George Eastman sacó al mercado una cámara que utilizaba carretes de película enrrollable, en lugar de placas planas de cristal. La fotografía se convirtió en un mundo accesible a cualquiera y el rollo de película dió paso al cine.
George Eastman nació un 12 de Julio de 1854 en Waterville (New York), no tuvo una infancia muy feliz. Su padre murió a los pocos años y las penalidades económicas estuvieron presentes hasta que Eastman alcanzó la mayoría de edad, fue entonces cuando consiguió un empleo en  el Rochester Savings Bank. Los ochocientos dólares mensuales que ganaba le proporcionaron estabilidad y la posibilidad de ahorrar tres mil dólares en siete años, dinero suficiente para emprender un negocio fotográfico. Eastman tan sólo era un aficionado a la fotografía, algo así como un hobby, sin embargo su proyección de futuro estuvo de lo más acertada, montó un monopolio tan increíble que, a día de hoy, no podríamos entender la imagen si no fuera por la simpleza de la palabra "Kodak".
La fotografía comenzó a ser algo obsesivo para Eastman, quien se empeñó en simplificar el complicado proceso: placas de vidrio húmedas, productos químicos, pesados porta-placas. Por entonces en Inglaterra ya se empezaban a desarrollar emulsiones de gelatina, todo un avance, ya que le daba la posibilidad de fabricar sus propias placas, mucho más ligeras y flexibles que el vidrio. En principio su reto era sustituir las placas pesadas por el papel, como soporte para las emulsiones y en forma de rollo. Lo que hizo fue lo siguiente: recubrió el papel, primero con una capa de gelatina soluble y después una segunda capa de gelatina sensible a la luz e insoluble. El resultado era que después de la exposición y del revelado, la gelatina que contenía la imagen era despegada del papel, después era transferida a una hoja de gelatina clara y barnizada con colodión (con éste procedimiento se consiguió reducir el tiempo de exposición a unos segundos). Ahora ya sólo quedaba hacer una cosa: llevar la fotografía al público en general, mediante la elaboración de una cámara nueva. La primera cámara Kodak 100 Vista utilizaba carretes de 100 fotos circulares y salió al mercado en 1888. Se produjo un gran cambio, nacía un mercado nuevo ya que cualquier persona podía convertirse en  fotógrafo, tan sólo tenían que apretar el "click" y la compañía Eastman hacía todo lo demás: el revelado. "Usted aprieta el botón y nosotros hacemos el resto".




 A partir de éste momento se creó una simbiosis perfecta. Los rollos de película transparente de Eastman, Thomas Edison (supuesto) creador a quien se le atribuye la lámpara incandescente y el fonógrafo dieron lugar al kinetoscopio o cinetoscopio: una máquina que permitía funciones muy limitadas (un claro precursor del moderno proyector cinematográfico). En realidad la historia de la bombilla empezó antes, cuando el italiano Alessandro Volta utilizó por primera vez un cable voltaico, inventado por él, para proveer de eléctrica corriente.  Y luego no olvidemos al gran  Nikola Tesla, ex-socio de Edison al que este último no dejó de pisotear y denigrar (pero esto se merece una entrada "especial"...). A partir de este momento vino todo lo demás. Los Hermanos Lùmiere y su cinematógrafo, capaces de filmar y proyectar imágenes en movimiento, toda una revolución.

George Eastman y Thomas Edison

Hermanos Lùmiere

El siguiente reto para Eastman consistía en pasar del rollo de película en "blanco y negro" al "color", y así fue. Para las películas, Kodak Kodacolor se convirtió en la marca de fábrica asociada a un lenticular temprano (color aditivo), introducido en 1928 para películas de 16 mm. Al cabo de los años ésta técnica permitió incorporar el color al cine. Fue la película "Becky Sharp" (La feria de la vanidad, 1935) de Rouben Mamoulian, una cinta legendaria por ser la primera rodada totalmente en technicolor, aunque artísticamente el protagonismo se le atribuye a "Gone with the wind" (Lo que el viento se llevó, 1939) de Victor Fleming.
George Eastman acumuló una gran fortuna a lo largo de su vida, desarrollando una gran labor filantrópica que se vió reflejado en la fundación de la Eastman School of Music o la Eastman Dental Dispensary. En los dos últimos años de su vida sufrió una enfermedad degenerativa que le afectó a la espina dorsal, sufriendo una gran depresión. Un 14 de Marzo de 1932, Eastman se suicidó de un disparo al corazón, dejando una nota en la que decía: "A mis amigos, mis trabajo está hecho, ¿por qué esperar?







George Eastman
http://www.kodak.com/ES/es/corp/historia/ninez.shtml